lunes, 15 de junio de 2015

Susurro I – Cuando despierto

“Amanezco hoy… 
por la fuerza del cielo, 
de la luz del sol, 
del resplandor de la luna, 
del esplendor del fuego, 
de la velocidad del rayo, 
de la rapidez del viento, 
de la profundidad del mar, 
de la estabilidad de la tierra, 
de la firmeza de la roca, 
Amanezco hoy… por la fuerza secreta que me guía” 
Bendición Irlandesa 

Amanece y la pereza es continua… tal vez porque el trasnoche fue largo, las películas cada vez van ocupando más espacio en mis tiempos muertos, los correos y las llamadas cada vez menos continuas y las gentes cada vez más distantes; la cama sigue siendo cómplice compañera, y es este despertar de cada día con este cuerpo lleno de pensamientos e ideas confusas que se dispone a marcar en el calendario un día más/un día menos, depende de donde se vea el vaso…medio vacío o medio lleno.
Hoy particularmente desperté feliz del sueño que tuve, será tal vez porque llegue a recordar una gran parte del mismo y pude estar aunque en sueños con personas que ya no veo hace mucho tiempo, incluso pude verte y aunque no te dejaste alcanzar a pesar de haber seguido tu paso con este yeso (que no me deja ni en sueños), pude darme cuenta que debía dejarte tomar ese bus, a donde…no sé.
Hoy al despertar sin miedo al movimiento cansino de este yeso, ni al dolor de la herida aun fresca que prometen 8 semanas de descanso/reflexión, el tiempo parece lejano, sin embargo otra vez viendo el calendario vuelve la misma pregunta, el vaso medio vacío o medio lleno, siendo que sin darme cuenta ya es Mayo y en un tris pasaron 5 meses de este año. Es duro parar en seco y ver que dejé pasar los días, los meses solo para olvidar que un día simplemente decidiste salirte de mi vida sin previo aviso, dejando varias preguntas sueltas, varias interrogantes, generando culpas, reproches, miedos, pero sobretodo tanta incertidumbre… sentir que ya sano la garganta de todo ese desangrado que no pude ponerlo en papel porque simplemente fueron meses que no hubo tiempo, ni valor para escribir y cuando diste la vuelta, cuando decidiste que ya no iba mas, simplemente no pude sacar esta tintallanto, vomitar las palabras, liberarme de este dolor que dejo esta mirada perdida en la nada...pero hoy despierto y aun te extraño pero ya no duele.
Volver a mirarse al espejo y reencontrarse, como si hubiera vuelto de una batalla de años, barba, cabello largo, pero más aún…tiempo... segundos, minutos, horas, días, meses llenos de todo y a veces llenos de nada.
Complicado encontrarse o reencontrarse en estos sueños de luz, darme cuenta que una vez quise escribirlos y ahora solo quiero archivarlos… darme cuenta que estaba olvidando la alegría, despertar y ver que hay un nuevo día al que no podre seguirle el paso (que irónico o broma de mal gusto), ver que muchas cosas van cambiando y pensar cuantos días los dejé pasar así… vacíos… reflexionar si realmente valió la pena… silencio.
Seguir durmiendo sería una buena opción, ya ni se bien que día es, todos los días parecen domingos y me transporto a un tiempo olvidado donde simplemente no se hace nada o mas bien un tiempo en el que quisiera hacer todo; el ser humano es muy contradictorio siempre quiere lo que no puede tener. 

En fin… desperté… empieza el día… que día?... Creo que Lunes

A siete semanas de volver a andar, Mayo, 25 del 2015

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola amigo Vladimir. He shallado tu blog y me ha resultado muy interesante el rincón del Vlady. He leido esta prosa poética Susurro I - Cuando despierto, y me ha gustado. Es del 2015. No abandones el blog. Voy a seguir leyendo y dejando en comentarios mis apreciaciones. Enhorabuena. Gracias.

Anónimo dijo...

Por cierto. No aparece mi nombre arriba. Pensé que de forma automática saldría. Soy Alexei. Un abrazo.